Los sueños de un ex piloto de carreras, han provocado lo que parecía casi
imposible, la homologación de un vehículo de la Fórmula Ford, para su uso legal
en carreteras europeas.
Christian Maier es un ex piloto alemán de 40 años cuya
ambición y amor por su antigua herramienta de trabajo, desencadenó una loca
idea de la que nadie apostaba que llegara a finalizar: homologar su vehículo de la Fórmula Ford – categoría inferior a la
Fórmula Renault y a la Fórmula 3000 – para poder conducirlo por todas las carreteras europeas y seguir siendo así un
piloto de carreras por las carreteras urbanas.
Decidido de convertir su Reynard 91F en un vehículo
apto para su conducción por carreteras abiertas al tráfico, necesitó el
asesoramiento de la entidad reguladora alemana de circulación – que bajo el
aviso que iba a ser algo caro – para cumplir su sueño, evitando que su joya de
juventud se consumiera en un garaje abandonado a al tiempo y al polvo.
Con unas modificaciones
más que obvias – guardabarros, faros delanteros escamoteables, pilotos
delanteros y trasero, bocina, freno de mano, etc – el vehículo paso de unos 420
kilogramos iniciales a unos muy pesados 525, decidiendo retirar el viejo motor
Ford de 130 CV a un potenciado motor Opel – el del modelo Calibra para ser
exactos – de 240 CV, facilitando una velocidad máxima de 250 Km/h.
¿Qué hacer cuando se desea conducir un auto de los años 20, con las
comodidades de las que ya nos hemos acostumbrados, como el aire acondicionado o
la dirección asistida?, firmas como Zimmar – con su modelo estrella Golden
Spirit – proporcionan soluciones a personas que desean tener un clásico actual.
No es ninguna sorpresa indicar que cuanto más años
tiene un auto, menor es el valor que
soporta. Año a año pasando el tiempo
llega un momento en que un coche pasa de ser viejo a convertirse en antiguo y
es justo en ese momento, cuando se traspasa esa delgada y efímera línea, en que
el valor vuelve a aumentar, sobrepasando en algunos casos – y con creces – el valor originar por el que se adquirió.
Cualquier amante de los autos clásicos que desee conducir su propio vehículo, descubre en
un primer lugar lo extremadamente caro
que supone adquirir una unidad en un estado adecuado para circular con él sin
problema alguno, conducción que bajo el miedo a una posible falla mecánica, se
suma el de su dificultad para asegurarlo y encontrar piezas de recambio.
A finales de la década de los años 70´S, en la soledad Florida, el empresario de la
automoción Paul Zimmer junto con su
hijo Bob, constituyeron la empresa Zimmer Motorcars, que bajo el diseño
original del clásico Duesenberg – famosos autos norteamericanos de los años
20´S –diseñan y fabrican un modelo de autos cuyo diseño neo-clásico, conjugan
de manera perfecta el estilo y diseño de principios de siglo, con la alta
tecnología de la época.
Modelo Sedan de dos puertas
Fabricado desde el año 1978 y finalizada su producción
diez años después – momento que se inicia la fabricación del segundo modelo, el
Zimmer Quicksilver – las diferentes versiones
coupe y sedán –esta última convertida también en limosina y cabrio –
contaban con detalles como sus ruedas blancas, faros redondos y mangueras de
escape cromadas, que se asemejan de manera muy precisa, a los vehículos más
caros y exquisitos de los “felices años 20”.
A pesar de su diseño clásico, el Golden Spirit contaba con adelantos
de la época como elevalunas eléctricos, aire acondicionado, control de
crucero e incluso equipo estéreo, el cual no debería ser necesario al disponer
del fabuloso rugido que desprendía el motor Ford V8 4.6 de 315 Cv – similar al
que disponía el Mustang GTs – con el que contaba la versión coupé del Golden
Spirit, o el también V8 de 239 Cv – el cual utilizaban las unidades fabricadas
del Lincon Town City – que montaba las unidades sedan.
Unidad coupe con motorización de 315 Cv
Después de un paro en la fabricación a causa de la bancarrota que provocó la mala gestión
tras la marcha de la familia Zimmer, su fabricación se reanudó en el año en el
año 2001, con la fabricación de hasta
cuatro nuevos modelos, como son las tres versiones sedán – tradicional,
convertible y con carrocería extendida – más una versión de dos puertas coupé
de inspiración deportiva, situándose en un rango de precios que se inician en
los 179.000$ USD.
Sedan de cuatro puertas
Su diseño particularmente fastuoso, como su exclusividad le hicieron uno de los coches más deseados para aparecer en películas y series de los años 80S y 90S, a costa de robar protagonismo a los propios actores y figurantes. Es de agradecer que a través de firmas como Zimmer –
sin olvidar a la española Hurtan – se pueda contemplar en la actualidad, del
característico diseño retro del pasado.